¿Se pueden congelar bayas, verduras, hierbas e incluso pan y huevos? ¡Y resulta que también se pueden almacenar en el congelador! Solo hay unos pocos matices importantes.
Como preparar el producto
Si intenta congelar los huevos tal como están, la cáscara se romperá y el producto se echará a perder. Quizás debido a esto, muchas personas piensan que los huevos no deberían congelarse en absoluto, pero todo se debe a la propiedad del agua para expandirse cuando se congela. Echemos un vistazo a los pequeños trucos que le permitirán congelar los huevos sin perder sus propiedades.
Así que necesitamos:
- limpiar platos secos y profundos (por ejemplo, un tazón)
- cualquier recipiente adecuado para congelar alimentos (recipiente o moldes para hielo),
- un poco de sal o azúcar
- un colador o una cuchara ranurada, algo adecuado para revolver (pero no batir) los huevos,
- y solo un par de minutos
Empezando:
- Lo primero que debe hacer es romper cuidadosamente la cáscara y verter el contenido en los platos preparados.
- Determine de inmediato la calidad del huevo: si surgen al menos algunas dudas, es mejor deshacerse inmediatamente del producto, ¡su salud es más costosa!
- Después de asegurarnos de la idoneidad, decidimos qué objetivos cumplirán los huevos en el futuro. Si en el futuro necesita dividirlo en yema y proteína, entonces debe hacerlo ahora. Un skimmer ranurado es perfecto para la separación.
Como congelar las yemas
Las yemas se pueden congelar en dos formas: cruda y hervida.
Yemas crudas
Por sí mismos, toleran bien las bajas temperaturas, pero al congelar las yemas crudas, es importante agregar un poco de sal o azúcar para evitar la cristalización y la pérdida de consistencia.
Que sigue:
- Vierta el producto en los platos para congelar, deje un par de centímetros hasta el borde para que la sustancia tenga espacio para la expansión.
- Ahora, en el congelador.
Importante
No olvides que al congelar, los huevos aumentan de volumen. También es importante cerrar la tapa herméticamente para mantener la consistencia de la masa líquida del huevo.
Hervido
Con las yemas preparadas, debe recurrir a acciones adicionales:
- Eliminamos las proteínas y las ponemos en una sartén.
- Rellene con agua con sal para que se superponga en un par de centímetros.
- Llevar a ebullición e inmediatamente retirar del fuego.
- Pongámonos de pie de cinco a diez minutos.
- Lo sacamos del agua y, asegurándonos de que no haya exceso de humedad, lo enviamos al contenedor para que se congele.
- Enviado al compartimento congelador.
Consejos de Miss Limpieza Antes de congelar, las yemas pueden desmenuzarse para que luego sea más fácil usarlas en la cocina. Además, la yema triturada se congela de manera uniforme, y es más conveniente almacenarla.
Ardillas y huevos enteros.
Las proteínas hervidas no son adecuadas para la congelación, ya que en cualquier caso perderán su estructura y sabor. Pero los huevos crudos (y, en consecuencia, los huevos enteros) se pueden congelar en silencio.
Para hacer esto, necesitamos:
- Separe la proteína, si es necesario, o viértala en todo el tazón.
- Revuelva suavemente. Es muy importante no agitar el huevo, es decir, mezclar para obtener una masa homogénea.
- Las proteínas crudas toleran bien la congelación sin ningún aditivo, pero si congela la yema y la proteína juntas, debe agregar una pizca de sal o una cucharadita de azúcar incompleta.
- Coloca el recipiente en el congelador.
El producto descongelado debe usarse de una vez: el procedimiento repetido estropeará los huevos. Es mejor descongelarlos en el refrigerador, ya que una fuerte caída en el calor afectará el sabor y la textura de la peor manera.
Cuánto en una cucharada
Un huevo de gallina entero en volumen corresponde aproximadamente a 3 cucharadas de la mezcla. La proteína de un huevo - 2 cucharadas, y la yema - 1 cuchara.
Los huevos adecuadamente congelados no son de ninguna manera inferiores a los frescos, y desde ellos puedes cocinar la misma variedad de platos.